Crónica de un corazón roto una mañana de Abril.

Muy bien quería compartirles lo siguiente, que a lo mejor a alguno podría parecerle completamente irrelevante (como todo lo que pongo en este blog) a mi me parece una muestra de la expresión del verdadero sentir, ese doloso que uno no puede pasar por alto asi como a cualquier cosa.

Por: Lila Loops (mi chingada microtecate light)

Despertar con incertidumbre de no saber si fue un mal sueño o de verdad te perdí.

Contemplo el techo de mi habitación como si te encontraras ahí… como si esa línea entre realidad y fantasía fuera a demostrarse ahí…

Escucho esa canción… esa canción que me recuerda lo mucho que te amo y te amaré, que siempre, desde el primer momento en que la escuché me recordó lo feliz y enamorada que estoy de ti. Una repetición constante de un te amo y de gratitud por la felicidad brindada para ambos... incluso cuando la escucho yo solita... me brinda una paz y tranquilidad y un respiro más.

Sin embargo, hoy la escucho y despierto... despierto… afronto mi realidad infantil de diferenciar fantasía-sueño-realidad, con tranquilidad… nostalgia y tristeza de saber que te perdí…

Bienvenida la bendita sensación de dolor, de vacio, tristeza absoluta, desconfianza, miedo, odio, de búsqueda, de lágrimas… de drama.

Creí que apenas comenzaba a olvidar lo que se siente el mal de amores, el corazón roto, el abandono ¡el que alguien se marche sin explicación!... Gracias, por que si no fuera por momentos tan llenos de dolor como este, no podría disfrutar el amor absoluto que puedo llegar a sentir, ya sea contigo o con alguien más... y me aferro, de verdad que lo he hecho, me aferro no por terquedad o capricho como siempre había sucedido... ¡sino por que dejé mi corazón ahí chingado! Te lo estas llevando... di tanto, de verdad lo hice esta vez, entregué todo lo que soy, lo bueno, lo malo, todo lo di, y no por mí… ni por ti… lo hice por ambos.

Aprendí a dejar de pensar en el “yo siento...”, “yo creo...” a mí me duele... en él. Él siente, él llora, él cree... aprendí el arte de la ejecución y buena aplicación de la palabra Nosotros en toda su extensión.

Crucé el puente... ese del amor exclusivo, del amor grande, del placer de la compañía, del silencio... gracias por venir y aparecerte en mi vida... por ayudarme a dejarme llevar, por la diversión, por los besos, abrazos y apapachos... por las miradas llenas de amor... te doy hasta gracias por romperme el corazón, por hacerme llorar... hasta eso estoy disfrutando.

Comentarios a: lilaloops@gmail.com

Y aunque esto no lo escribo yo me a gustado la idea de colocarlo en el blog (Gracias cagoncilla por dejarme publicarlo)